También conocida como «rocío de sol». Es una planta carnívora, la más popular en su especie por ser muy resistente y de fácil cultivo. Es originaria de Sudáfrica, en la Ciudad del Cabo. es sun variedad posee el musilago de color blanco !!
Disponible en maceta n°6, 9, 12, 15.
Drosera Capensis alba
Droseras de mucilago blanco !!!
¿Cómo caza esta planta?
Es una planta perenne, tiene hojas cubiertas con pelos con mucílago, sustancia pegajosa que tiene por función atrapar a los insectos que luego serán digeridos por enzimas. Al contacto se produce una reacción que curva la hoja y envuelve la presa. Esta escena dura unas horas en tiempo real y ocurre en pleno verano cuando las temperaturas son altas.
Atrae presas pequeñas, fundamentalemnte insectos. Luego de que las toca la presa queda atrapada en el pegajoso mucílago que les impide escapar, más tarde el insecto morira a medida que el mucílago lo envuelve y tapa sus espriráculos. Las enzimas lo digieren y liberan sus nutrientes que luego serán absorvidos por la superficie de la hoja.
Mide hasta treinta centímetros de altura y es muy fácil de cultivar. Sus flores son blancas y dispuestos a pico, florecen y se marchitan, a su vez, una tras otra.
Reproducción
Se poliniza ella sola pero si se quiere se puede hacer manualmente. Después de haberla polinizado la flor perderá sus pétalos y comenzará a producir sus semillas. Estas se pueden recolectar cuando el tallo floral se haya secado, en ese momento se coloca un papelito debajo de la flor y se y sacude un poco hasta que las semillas caigan. En ese momento son perfectamente aptas para la siembra, en caso contrario se deben conservar en un lugar seco y fresco. Hay que tener en cuenta también que las semillas van perdiendo efectividad conforme pasa el tiempo, o sea que lo mejor es sembrarlas cuanto antes.
Cultivo
Temporada de cultivo es de abril a octubre. En la temporada de invierno, la Drosera capensis ‘Alba’, no necesita de un verdadero descanso, resiste muy bien a temperaturas muy bajas durante largos períodos. Durante el invierno se puede cultivar en dos formas diferentes:
Con el clima frío: hay que dejar la planta fuera para que pierda completamente las hojas, las cuales vuelven a crecer en la primavera siguiente.
Con bajas temperaturas (5 ° -10 °) deben colocarse en áreas protegidas donde la planta continuará creciendo mientras se mantiene el follaje. Con este último método, a lo largo de los años, la planta tendrá una palmeta forma bonita.
Esta planta es una de las más fáciles en lo que a cultivo se refiere. Crece muy bien en lugares abiertos, donde disponga de luz indirecta y sea regada con agua con bajo contenido mineral. No requiere invernaderos pero puede ser cultivada también en ellos. No tiene periodo de hibernación, a diferencia de otras especies del género.
Reproducción
La flor de la Drosera capensis alba no hay que cortarlas pues aguanta bien la floración y es facilísimo conseguir las semillas.
Se poliniza ella sola pero si se quiere se puede hacer manualmente aunque la flor de la drosera capensis alba es dura y hay que estar muy pendientes.
Después de haberla polinizado la flor perderá sus pétalos y comenzará a producir sus semillas. Estas se pueden recolectar cuando el tallo floral se haya secado, en ese momento se coloca un papelito debajo de la flor y se y sacude un poco hasta que las semillas caigan. En ese momento son perfectamente aptas para la siembra, en caso contrario se deben conservar en la heladera. Hay que tener en cuenta también que las semillas van perdiendo efectividad conforme pasa el tiempo, o sea que lo mejor es sembrarlas cuanto antes.
Cuidados
El riego debe ser continuo por bandeja ( se debe colocar la maceta sobre una bandeja plástica., l agua se coloca en la bandeja nunca sobre la maceta). En verano los riegos seran más abundantes y constantes, en las épocas frías más espaciados.
Esta planta debe tener una buena humedad, una luz moderada y el sustrato de turba y perlita.
La luz si que es algo esencial para la Drosera capensis alba. Hay que darle el mayor tiempo posible de luz directa filtrada por un cristal (aunque sin cristal también vale). Dándole un mínimo de 6 horas de sol al día, en caso de no ser posible, las hojas perderán su color rojo y los pelillos se volverán blanquecinos y no producirán el mucílago encargado de atraer y digerir los insectos.